¿Estás dudando entre comprar rosas frescas y rosas preservadas y no sabes cuál será la mejor opción? Hoy te explicaremos las principales diferencias entre cada una de ellas y cuáles son los cuidados que necesitan.
Las rosas frescas son flores recién cortadas que necesitan agua y luz para poder mantenerse en buen estado. Así, los principales cuidados que han de tenerse con este tipo de rosas son los siguientes:
Las rosas preservadas son flores que han pasado por un proceso de preservación para que su belleza y su frescura puedan mantenerse sin necesidad de proporcionarles agua o luz. Así, pueden conservarse en buen estado durante meses e incluso años y solo precisan de los siguientes cuidados:
Ahora que ya conoces en qué consisten las rosas frescas y las preservadas, solo debes tener en cuenta cuáles se adaptan mejor a tus requisitos y disfrutar de su aroma y su belleza.
Cualquiera que sea la que elijas, le dará un toque de vida y de dulzura a tu hogar de manera inigualable.
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